Reseña de FURY (CORAZONES DE ACERO) (2014) – David Ayer.

Como buena película bélica que se precie en el mundo del cine, debe de constar con una serie de requisitos fundamentales para tener éxito y que en su esquema: guste a todo el público posible. Dentro de dichos requisitos tendremos a un joven desorientado dentro de la guerra propiamente dicha, un jefe al mando que ha presenciado en ocasiones anteriores lo horrores más inhumanos, un par de batallas y explosiones impresionantes para terminar, en última instancia: con el gran final apoteósico, donde nuestros protagonistas se enfrentarán al enemigo. En algunas películas perderán y en otras ganarán, todo depende… de muchas cosas la verdad.

Nos consideramos amantes de las películas bélicas, ambientadas en la Primera o Segunda Guerra Mundial, en clave dramática o incluso en el ámbito de la comedia más absoluta. Fury (porque Corazones de acero nos resulta un título de m*erda para la película) causó cierto interés entre nuestro círculo más cercano en su momento de estreno, y un par de años después (como mucho) nos decantamos por verla, y hace unos días también, viéndola así en 2 momentos muy diferentes de nuestro criterio cinematográfico. Nos sigue gustando, no vamos a alargar más el veredicto general de la película, no es nuestra cinta bélica o de temática similar favorita, pero aun así no desaprovechamos la ocasión si podemos verla. Pero si que es verdad que, con cierta madurez fílmica, vemos la película con otros ojos y somos más críticos u objetivos con respecto a la película.

Es de bien sabido por todos que poner a Brad Pitt al mando del tanque iba a ser un acierto seguro, ya que Brad Pitt siempre esta bien haga lo que haga. Llámalo talento, llámalo versatilidad, llámalo como quieras. Por lo que a él, poco más podemos decir. Con respecto al resto del elenco masculino, tampoco podemos decir mucho en su contra: los personajes están muy bien construidos, bien definidos, se mueven en un mismo campo de recorrido emocional y a lo mejor, eso ha jugado en su contra un poco. Da la sensación de que los personajes tienen X características y X motivaciones y de ahí no se mueven, rozan incluso el tópico; pero no por ello nos disgusta. A pesar de las locuras que pudo hacer Shia LaBeouf para conseguir el papel o meterse en su personaje, no deja de ser uno de nuestros favoritos del cast junto al mencionado Brad Pitt y Jon Bernthal.

En líneas generales la película no deja claro cual es el mensaje que quiere transmitir al público espectador y tampoco el enfoque, como si los límites estuvieras difusos. Salvo que lo más claro y concreto son los personajes, terriblemente definidos. Hay algunas secuencias que son algo lentas y, en nuestra opinión, aburridas; pero como ya se ha mencionado antes: lo compensa con grandes batallas entre tanques, alemanes y aliados, y muchas explosiones y tensión dramática. Pero es que si todo esto en una película bélica no se consigue, verla sería una pérdida de tiempo. Es la historia de lo que pasaría si juntas a mucha testosterona heterosexual, un tanque, armas y con Brad Pitt al mando.

🌕🌕🌕/5 

¿Sabías que Shia LaBeouf se arrancó un diente para realizar con mayor veracidad su personaje en Fury? Te leo en comentarios.