Reseña de CINEMA PARADISO (1988) - Giuseppe Tornatore.
Culpo a Ennio Morricone por hacerme llorar toda la película, dicho y escrito queda.
Para inaugurar esta "nueva normalidad" y con los cines abiertos, me he trasladado hasta el mío de confianza para disfrutar de esta joya del cine y en la que el nombre del blog está inspirado. Algún día explicaré el significado del nombre y el significado el logo, pero ya es arena de otro costal.
Es una carta de amor al cine en estado puro, donde un joven Toto está destinado a vivir entre celuloides teniendo como referente las películas proyectadas para llevar una vida que, en principio, no parece ser muy emocionante. Esta historia de amor entre el chico y el cine es más impresionante y romántica que cualquiera que haya visto antes, empaticé desde el primer momento con el chico ya que siento esa misma fascinación por el séptimo arte. Un viaje a través de la vida de Salvatore sin que eclipse demasiado a los personajes que le acompañan. Alfredo, estarás de aquí en adelante en mi corazón junto al Nuevo Cinema Paradiso. Poco más que decir, porque es una película que hay que ver.
En un pueblo donde no pasa nada, la única manera de soñar, estando despiertos, es disfrutando del cine.
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