Reseña de JUDAS AND THE BLACK MESSIAH (2020) – Shaka King.
Puede que las historias de infiltrados en bandas en los años 60/70 lo tengamos algo visto en el cine, pero os podemos asegurar que sin lugar a dudas: esta película merece la pena verla. Y además, podéis ver el tráiler, os animamos a que os deleitéis con un pequeño aperitivo de lo que luego serán 126 min aproximadamente de tensión, thriller, violencia y caos racial, todo ello basado en hechos reales.
Un rasgo que ha sido comentado tras publicarse la lista de nominados a los próximos premios Óscar 2021, es la doble nominación de sus 2 actores protagonistas, los cuales optan por el premio a mejor actor de reparto. Han sonado las alarmas alegando que era un acto racista, ya que ninguno de los 2, a pesar de ser protagonistas dentro del film, han sido nominados a mejor actor (protagonista). Un hecho que nos ha fascinado leer y del cual hemos extraído nuestras conclusiones después de visionar esta excitante película. Tanto el personaje interpretado por el ganador de un Golden Globe a mejor actor de reparto en una película Daniel Kaluuya, como el personaje interpretado por el actor Lakeith Stanfield, son igual de importantes y con el mismo peso dramático dentro de la trama de Judas and the black messiah (2020). Creemos que hubiera sido un error calificar a uno por encima del otro en importancia dentro del film, por lo que la doble nominación a la misma categoría como mejor actor de reparto lo hace mucho más interesante. Al mismo tiempo, creemos que el verdadero protagonista de la película reside en el colectivo negro en Estados Unidos en los años 60 y 70, no en 2 personas concretas. Aunque tal vez, estas reflexiones sea leyendo mucho entre líneas, pero preferimos pensar así que creer que la academia ha actuado de forma racista no otorgando el reconocimiento adecuado a 2 actores profesionales, valorando su raza antes que su trabajo hecho.
Pero dejando a un lado las conspiraciones, la película es una auténtica maravilla que funciona a la perfección gracias a los 2 actores mencionados, realizando unos personajes ricos y profundos, y con una fuerza que traspasa la pantalla. A ambos los hemos visto trabajar juntos anteriormente en Get out (2017) de Jordan Peele, y repiten juntos de nuevo tratando como se diría coloquialmente “problemas de negros”. Problemas que no son ficción, que están a la orden del día cuando no debería de ser así.
Ojalá fuera cosa del pasado, ojalá fueran historias que contar porque pertenecen a la historia de los Estados Unidos de América, ojalá fuera lo que tuvieron que pasar las personas de raza negra en el pasado para conseguir igualdad entre los seres humanos en la actualidad. Y aunque hayan conseguido muchas cosas, aun queda mucho por igualar, a pesar del daño que ya está hecho. Que la situación actual sea similar (salvando las distancias) a la de los años 60 que transcurren en la película, la hace terriblemente atractiva para el espectador, porque a pesar de ser 2 épocas diferentes: todo nos es familiar, y no debería.
Todo ello ha sido suficiente para tener 6 nominaciones a los premios Óscar: mejor película, mejores actores de reparto (Daniel Kaluuya y Lakeith Stanfield), mejor guion original, mejor fotografía y canción (Fight for you). Es pronto para dar nuestras predicciones, pero sus 2 protagonistas, como ya hemos comentado, están de sobresaliente.
🌕🌕🌕🌗/5
¿Crees que la academia a actuado de forma racista ante las nominaciones de los 2 protagonistas o crees que ha sido mera casualidad? Te leo en comentarios.
Buena reseña, no estaba al tanto del tema de la nominación de los 2...
ResponderEliminarPero si su peso en la película es igualitario lo veo justo.
gracias por tu comentario, te recomendamos ver esta película :)
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